En las últimas décadas se ha venido desarrollando una floreciente industria de entretenimiento, donde los casinos y los juegos de video han logrado gran aceptación en todas las culturas, generando gran impacto en la sociedad.

 Los datos estadísticos revelan que el creciente negocio añadió una alta cifra de dinero a los recursos de los países, gracias al recaudo de impuestos de este importante sector económico. Además, todo indica que los individuos hoy en día gastan mucho más dinero en apuestas que en otras actividades lúdicas y de recreación como el cine, las visitas a los museos y los paseos a los parques, debido a que el ser humano está en una búsqueda constante de nuevas aventuras y experiencias excitantes.

El impacto social de los casinos y los juegos de azar

El mundo de las apuestas, los casinos y los juegos de azar han traído a cuestas aspectos tanto negativos, como positivos que impactan la sociedad, veamos:

Entre lo positivo:

  • Son sinónimo de modernización, infraestructura, crecimiento económico y un efecto multiplicador en la sociedad al constituirse como una fuente generadora de empleo que oxigena la economía y calidad de vida de la comunidad.
  • Los casinos se convierten en lugares de entretenimiento y diversión, donde es posible alejarse del estrés de la cotidianidad, al tiempo que crea espacios propicios para socializar, aplicar las técnicas y habilidades en los distintos juegos, además de buscar obtener algunas ganancias extras.
  • Los juegos de azar y los casinos se han convertido en una herramienta importante para incentivar el turismo, ya que los viajeros del mundo fuera de querer conocer lugares históricos, desean vivir la adrenalina de las apuestas, acompañadas de un buen trago y grandes espectáculos.
  • Los impuestos que se recudan debido a las actividades legales de los casinos engrosan las arcas del presupuesto de las naciones, convirtiéndose en una fuente directa de salud, empleo y bienestar para los más necesitados de la sociedad.

Entre lo negativo:

  • La falta de control en el juego lleva a los jugadores a convertirse en ludópatas, lo que puede llegar a crear ambientes familiares y laborales hostiles, falta de responsabilidad con todas las tareas, afectaciones psicológicas y grandes pérdidas económicas, que impactan desfavorablemente al individuo y su entorno.
  • La búsqueda patológica de excitación y euforia lleva a los jugadores a desarrollar trastornos explosivos que aumenta la agresividad, al tiempo que destapa la cleptomanía o impulso por robar para poder jugar, hasta llegar a límites de desesperación como la tricotilomania, donde se arranca el cabello para liberar tensión.
  • Un ambiente de alto intercambio de dinero como son los casinos y casas de apuestas se presta para que el crimen organizado lleve a cabo actos delictivos, corrupción, robo y lavado de activos, que desfalcan la economía de la sociedad e incrementan la inseguridad, afectando directamente a toda la comunidad.
  • La falta de legalización de algunos casinos ha hecho que aumente la fuga de divisas, convirtiéndose en una pesadilla para las autoridades gubernamentales, ya que deterioran el presupuesto de la nación y disminuyen la calidad de vida de la comunidad.

La industria del entretenimiento los casinos y el azar, al igual que las entidades gubernamentales de salud y control, conocen las ventajas y desventajas de este sector, por eso en común acuerdo realizan campañas donde abogan por un juego responsable que aleje a los jugadores de la ludopatía, a la vez que trabajan por la legalización del juego y el pago de los impuestos, buscando en todo caso un impacto social favorable que se traduzca en bienestar y beneficios económicos en todo momento.