Los juegos de azar como el póker, donde se pueden emplear reglas matemáticas y estadísticas para determinar las probabilidades de éxito en una partida son ampliamente practicados, analizados y estudiados por los inversionistas de bolsa y los expertos en negociaciones en todo el mundo, ya que algunas de las técnicas aplicables al juego pueden servir de lección a los protagonistas del engranaje de los negocios y las inversiones.

El póker ha pasado de ser solo un divertido juego de cartas para convertirse en una valiosa herramienta para hacer negocios inteligentes, ya que los estudiosos afirman que las estrategias y habilidades que desarrolla el juego, se pueden extender a los programas de entrenamiento de los inversores y de los agentes negociadores de las empresas que buscan formar personal con una visión más estructurada, fortaleza emocional y habilidades competitivas.

El póker es un juego de inteligencia

Los torneos de póker son aclamados por los jugadores novatos y profesionales, pero también por los negociadores de importantes compañías que ven en este juego una afición que les sirve para desarrollar técnicas valiosas en su profesión que los inclina a conseguir negocios lucrativos que van más allá del juego. Algunas de las enseñanzas que el póker puede aportar a los negocios inteligentes, son:

Control emocional: Destacados jugadores de póker insisten en la importancia de mantener el control sobre las emociones, convirtiendo esta premisa en una regla de oro no solo para el juego, sino también para las negociaciones inteligentes, ya que la paciencia, la mesura y la tranquilidad permiten que se logre analizar las debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas que se presenten, de tal forma que se pueda llevar a feliz término una productiva negociación y un buen juego.

Jugar a varias manos: Los jugadores saben que la carta ganadora llegara en el mejor momento, por eso apuestan en varias manos en la misma mesa para lograr mejores ganancias. Los negociadores saben que no se debe invertir todo el dinero en una sola empresa, sino que se debe tener diferentes modelos de negocio proyectados, calculando el riego, el beneficio y el valor esperado, de tal forma que se vislumbre el negocio que retorne una mayor rentabilidad y crecimiento.

Saber cuándo retirarse: Los jugadores de póker no aceptan todas las manos que les llegan a la mesa y en muchos casos buscan la posición final en la mesa de juego buscando un mayor control sobre las intenciones de sus adversarios. Los inversionistas y negociadores saben que no todas las empresas son rentables, por eso realizan estudios que les permite conocer sus competidores y las ganancias que genera cada negocio, de tal forma que se realice una valoración de las utilidades y la viabilidad de cada una de las empresas, desechando a su paso las que no logran cumplir con las pretensiones del éxito esperado

El póker enseña a hacer negocios inteligentes, ya que se fundamenta en modelos estadísticos y matemáticos de probabilidades donde los participantes aplican estrategias psicológicas;  como el manejo de las emociones,  blofear o el póker face; que van unidas a técnicas de juego; como participar en varias manos de forma estratégica para lograr el objetivo de ganar en cada partida; por eso los corredores de bolsa y los inversionistas reconocen que en la práctica del póker se hallan herramientas que los harán  triunfar en el mundo de los negocios de una manera inteligente.